Cada uno sabe qué es lo que le define como ser viviente, como ser humano, como persona. Yo, personalmente , me hago dos preguntas a mí mismo, y las respuestas me definen como lo que soy. La primera pregunta es : ¿El ser humano ha de ser libre o no ha de serlo? . Para mí, el mundo es mundo sólo si las personas tienen libertad de elección. Un mundo sin libertad de elección, no es mi mundo. Si no tuviera libertad de elección, no estaría vivo, estaría muerto o , simplemente , no existiría.
Está claro que la persona no siempre es libre. Siempre existen los condicionantes. Pero en última instancia debe decidir. Esa capacidad de decisión le define como ser humano.
La segunda pregunta es: ¿Deben existir el bien y el mal? ¿No sería mejor un mundo sin el mal? La respuesta , para mí , está muy clara. Un mundo sin diferencia entre el bien y el mal, sería un mundo neutro, sería indiferente si todo está bien o todo está mal, por tanto , todo estaría mal, por que no habría diferencia. Mi mundo es un mundo donde hay diferencia entre el bien y el mal, una cosa va con la otra.
En resumen, mi mundo, el mundo donde mi vida tiene sentido, es un mundo donde hay diferencias entre el bien y el mal, y donde los seres humanos tienen libertad de elección.
¿Ésto quiere decir que tenemos que soportar estoicamente el mal? Ni mucho menos. Todo lo contrario. Justamente por que tenemos libertad de elección , debemos intentar cambiar el mundo. Cambiarlo a mejor, claro. Un mundo sin libertad, un mundo sin diferencia entre el bien y el mal no es susceptible de cambiar. Éso hace emocionante y "viva" la existencia.
El dolor, el sufrimiento, la muerte, sobre todo cuando se nos aparecen gratuitos, aleatorios, crueles, nos sublevan. Nos remueven por dentro, nos descomponen. Aún así, hay que seguir adelante, intentando que esas cosas no pasen.
Pero tan importante como lo que estoy diciendo es no llenar de contenido ético lo que no lo tiene. Todos tenemos nuestras razones para actuar como lo hacemos. No es malo quien no actúa como a nosotros nos gustaría, es diferente. Si le quitamos la libertad, le quitamos la esencia. No estoy hablando de actos ilegales, para éso está la policía y los tribunales. Estoy hablando de hacer y sobre todo de pensar diferente a nuestro modelo.